Hacerte más fuerte no sólo consiste en construir músculos más grandes. La fuerza también mejora debido a los cambios que ocurren en el sistema nervioso.
Como el cerebro controla la musculatura
La unidad motora es una simple neurona que se conecta con un grupo de fibras musculares. En cada músculo hay miles de unidades motoras. En los músculos más grandes, una unidad motora puede contraer miles de fibras musculares, pero en los músculos que necesitan un control más fino, como por ejemplo el ojo, una neurona puede controlar sólo unas pocas fibras musculares.
Cuando haces ejercicio
Aumenta el número de unidades motoras
La capacidad del cerebro para activar un número mayor de unidades motoras mejora con el entrenamiento. Cuando un atleta empieza a entrenar levantando pesas parece que aparezcan músculos nuevos aunque en realidad no se añade ninguno. El cuerpo está aprendiendo a activar las fibras musculares que ya tiene.
Aumenta la velocidad de contracción muscular
El cerebro no sólo aprende a activar más unidades de motores, sino que también aumenta la velocidad a la que se activan. Con ello también aumenta la velocidad y la duración de la contracción muscular.
Aumenta la activación de unidades motoras de alto umbral excitatorio
Cuando el cerebro inicia una contracción muscular, recluta primero las fibras pequeñas (lentas y débiles) que generan poca fuerza y que son llamadas de bajo umbral excitatorio (fibras tipo I), ya que con ellas se realizan las tareas diarias más básicas como caminar. A medida que las necesidades de fuerza aumentan, se reclutan más unidades motoras de bajo umbral y algunas unidades motoras de umbral excitatorio más alto (fibras tipo IIa). Cuando la fuerza requerida es muy alta se reclutan casi todas las fibras musculares (tipo I, II a y II b).
Con el entrenamiento, mejora la capacidad de reclutar unidades motoras de alto umbral excitatorio y la velocidad para reclutarlas.
Aumenta la coordinación de las unidades motoras
Para mejorar la fuerza y la potencia muscular es básica la capacidad de usar las partes elásticas del músculo para crear movimiento. Con el entrenamiento, el sistema nervioso aprende a realizar de manera eficiente el reflejo de estiramiento muscular.